Primer Mensaje en esta Página-Web, Acerca de los Angeles
"ENCUENTROS CON ANGELES
EN LA ACTUALIDAD:
REALES Y SUPUESTOS"
INTRODUCCION
Shalom, preciosos corderos del Mashiaj Yahushua; les ama, saluda y extraña su hermano, amigo y servidor, Rafael. O tal vez debería de escribirlo así: "rafael," en minúsculas, para que no se me olvide que no soy la gran cosa, ¡porque sin Yahweh NADA somos!
¡"Polvo y cenizas" nadamás somos, queridos míos! Pero por la gracia y el amor del Padre Yahweh, y la sangre de Su Hijo "el Cordero Yahushua," tenemos por delante un precioso llamamiento celestial que atender, y una esperanza bastante firme y concreta para nuestra salvación---me refiero a que seremos salvos, ¡si es que perseveramos firmes hasta el fin!
Y la pregunta obligada es, ¿pero por que no habríamos de perseverar, queridos amigos y amigas...? ¿Por qué nó?
¿Qué de "bueno" nos ofrecen la carnalidad y el pecado, queridos corderos?
¿Qué nos ofrece este mundo corrupto y perecedero; que sea IGUAL o MEJOR que la vida eterna en el maravilloso Reino Kodesh de infinita paz y rectitud del mundo del mañana, que Yahweh nos ha ofrecido junto a El, a Su Hijo y los ángeles...?
¡Yo no sé de nada que siquiera se le acerque o iguale a eso, preciosos míos---y mucho menos, que lo supere!
Pero "por ahí" hay (por este mundo, y en las congregaciones también se han inflitrado) bastantes personas diríamos "enigmáticas," incluyendo ministros; con percepciones algo torcidas de lo que constituye el Reino Kodesh de Yahweh, y de como entrar en él...porque han sido influídos, seducidos y engañados por cierto tipo de ángel que gusta de ofrecer a otros lo que no es suyo.
Amados, esto me recuerda a cuando Ja Satán se llevó a Yahushua a lo alto para tentarlo, para que viera todos los reinos de la tierra con el fin de generarle la codicia, y hasta se atrevió a decirle, "si te postras ahora mismo ante mí, todo esto será tuyo."
Por supuesto, Nuestro Amo Yahushua no le creyó ni titubeó por un segundo, queridos amigos y amigas; y no dobló rodillas ante baal. Pero algunos seres humanos son demasiado curiosos y ambiciosos, ¡y tienden a creer a todo lo que cualquier espíritu les diga, y "doblan rodillas" aunque no lo hagan de una forma literal!
En esta ocasión, hablemos precisamente de esos seres espirituales que en las páginas de la Torah se describen como "ángeles." Pero acerca de ellos no diremos ni demasiado, ni muy poco. Sólo lo justo, y que Yahweh nos haya revelado.
Como introducción a este mensaje, empecemos comentando que la gente ---tanto "llamada" como "no-llamada," "santa" o "impía"---generalmente todos alguna vez han escuchado hablar algo acerca de los ángeles...aunque sea lo mas mínimo o errado. Pero algo han escuchado.
Amados, comunmente la gente sabe muy poco acerca de los seres angelicales que Yahweh creó, y sin embargo de éstos "aún-para-muchos misteriosos" seres celestiales espirituales, ¡existen millones en el universo! Uno pensaría en conclusión; que la existencia, desempeño y propósito de los ángeles, debería ser cuestión de común conocimiento. Pero no es así.
Muy poca gente sabe algo concreto acerca de estos seres. Otros creen saber muchísimo sobre ellos, pero generalmente hablando, estas personas obtienen su información de donde no deben. Y es que, hasta los santeros, satánicos y hechiceros, hablan como si conocieran mucho acerca de los angéles...pero solo saben de demonios. ¡Que Yahweh los reprenda!
Antes de acudir a nuestra confiable fuente de información---la Palabra de Yahweh declarada en las Sagradas Escrituras---abundemos un poco mas acerca de lo que la gente conoce (o alega conocer) cosas acerca de los ángeles. Yo le he preguntado a alguna gente directamente, otros me ha preguntado o consultado a mi voluntariamente, y a otros los he visto hablando por radio o televisión acerca de estas cosas...con una autoridad, diría yo al menos, muy cuestionable.
Pero en sí, ¿qué es lo que mas dice la gente al respecto de los ángeles?
La mayoría de la gente concuerda en una cosa, queridos amigos y amigas, y se trata de que los seres humanos son prestos a admitir que nunca en sus vidas han hablado con un ángel. Sí, eso dicen casi todos. En la mayoría de los casos podrían tener razón.
Pero en cuanto a otros casos, uno se podría preguntar, ¿cómo podrán estar tan seguros de lo que dicen..?
A todo esto, queridos míos; ¿que parámetros confiables utilizan ellos para concluír con tanta seguridad, si han hablado o no, con un ángel? Para empezar, ¿cómo se supone que luzca un ángel cuando se nos aparezca aquí en la tierra?
¿Se supone que sea de aspecto luminoso, que tenga grandes alas como las aves, o que lleve un letrero enfrente que diga "soy un ángel"? Si en verdad fuesen así, entonces tendría que decirle a toda esa gente que les creo, ¡y que yo tampoco he visto ninguno! ¡Porque yo no he visto a ninguno que se aparezca así!
Otros no están tan seguros de nunca haber hablado con un ángel, y piensan que tal vez cierta persona extraña con la que una vez sostuvieron una corta pero impactante conversación, pudo haber sido uno de esos seres angelicales, materializado como una persona humana casi "común y corriente."
Amados, dejemos esto al menos meridianamente claro: ¡es que los ángeles no siempre se le aparecen a los seres humanos botando rayos de luz de las puntas de sus dedos, ni haciendo similares despliegues de su poder sobrenatural ante miles de personas boquiabiertas! De hecho, casi nunca se aparecen así---¡pero ha ocurrido!
Pero, yendo al otro extremo de la situación, algunas otras personas categóricamente afirman que hablan con ángeles con bastante frecuencia. De este tipo de gente, también encontramos.
Amados, hay hombres y mujeres---que ni siquiera han sido "llamados por Yahweh," ¡y que sin embargo alegan que hablan con supuestos "ángeles" casi todos los días! ¿Podrá ser verdad eso, amigos y amigas?
¿Por qué los visitarían a ellos con tanto interés, mientras que a otros seres humanos no? ¿Para qué les hablarían a ellos con tanta frecuencia?
¿Qué será lo que esos "ángeles" les dicen a estas personas cada vez que los visitan?
Una vez yo estaba viendo un canal local en la tele, y salió hablando una de esas personas dizque "expertas en el ámbito espiritual." El entrevistador le preguntó, "¿y que te han dicho todas esas veces?," y el sujeto respondió, "Pues, me dijo que teníamos que prepararnos, que iban a venir tormentas, terremotos, maremotos y toda clase de desastres al mundo. Y que al noreste de Puerto Rico va a caer un gran meteoro en el océano, por lo que viene un enorme tsunami que va a causar gran destrucción a 2/3 partes de la isla y a casi todo el Caribe." Oí dos o tres cosas mas, y terminé apagando la tele.
Queridos míos, no sé Ustedes, pero yo en lo particular no necesito que me venga un hombre ateo a decir que un supuesto ángel le dijo este tipo de cosas en un sueño. ¡Todo eso y más, ya hace casi dos mil años que nos lo ha dicho Yahweh a grandes razgos en las Sagradas Escrituras! Tal vez ese hombre se basó en lo ya escrito en la profecía para luego inventarse cosas que vayan de acuerdo y decir que "un ángel se lo reveló en un sueño." O tal vez fue cierto que un angel se lo reveló, pero como algo solo para él personalmente, o para hacer que el se preocupase y creyese. Sin embargo, la duda queda, porque hay mucha gente oportunista y sensacionalista en el mundo, que hablan de las cosas ocultas de Yahweh, ¡y ni siquiera creen en los fundamentos mas básicos de la fe!
Pero en la Escritura también se habla de seres humanos que tuvieron encuentros con ángeles, encuentros que oscilan entre lo misterioso y lo casual. ¡Con ángeles DE VERDAD!
Por ejemplo, el sobrino de Abrahjám recibió a dos en su casa (pero de lo que ocurrió a continuación ahí, ¡todavía no se ha dejado de hablar!), Yaacob luchó con uno, y quedó cojo de una cadera por varios días, luego vió a miles de ellos subiendo y bajando por una escalinata desde el cielo; por otra parte, Yosef y Miyriam (los padres de Yahushua) hablaron con ángeles avisadores en mas de una ocasión, otro ángel sacó al apóstol Pedro de una cárcel, a Sarah la esposa de Abrahjám un ángel la reprendió por haberse burlado de él (agraciadamente, sin mayores complicaciones inmediatas para esta ingenua mujer) y, de hecho; el propio Abrahám cenó con dos de ellos---¡o con TRES! (si contamos a quien luego se convirtió en Yahushua, como a uno de esos ángeles).
De esos ejemplos podemos concluír, que los ángeles de Yahweh realmente visitan, cenan, avisan, ayudan, luchan, reprenden; y hasta destruyen a algunos seres humanos---como en el caso de Sodoma y las ciudades de la cuenca. De no haber sido por Abrahjám y su insistencia ante Yahweh, su sobrino Lot y toda su familia hubieran perecido en ese desastre de tan gigantescas proporciones. Pero en la Torah vemos que no fue así. ¡Los ángeles de Yahweh los libraron!
De manera que algunas de esas cosas que en la actualidad la gente a veces cuenta como tan insólitas, podrían ser ciertas, queridos míos; pero la mayoría de ellas son torceduras, percepciones falsas, o de plano soberbias MENTIRAS---usualmente para cautivar la atención de un público ingenuo pero muy curioso, ¡y hacerse de dinero con esas entrevistas y reportajes!
En este mundo en que vivimos, hay gente cuerda, hay gente mentirosa y loca, y hay gente que no saben ni lo que sus ojos ven. (Yo a veces digo que no saben ni donde tienen puestas las narices.) Entre ellos, algunos afirman haber recibido la visita de ángeles, y casi todos se atreven a garantizar que son ángeles "buenos," o sea, enviados por el Padre Creador.
¿Cómo pueden estar tan seguros, queridos amigos? Otra vez: ¿que sabiduría y parámetros utilizan estos seres humanos para determinar qué és, o que no és, "legítimo" ?
Amados, hay que tener mucho cuidado con supuestas "apariciones." De igual forma, hay mucha gente viendo "vírgenes" aparecerse en distintos lugares del mundo---y muchas de esas apariciones no son inventadas. Pero la Escritura afirma que Ja Satán es el "padre de la mentira," y maestro por excelencia del artificio, amados míos; lo cual quiere decir que él es un engañador, y que utiliza cosas impostoras para representar la verdadera realidad y confundir a los que caigan engañados..
De manera que todas las personas que están mintiendo cuando han dicho haber hablado con ángeles, están siendo inspiradas y dirigidas por Ja Satán...¡lo cual quiere decir que al maligno Ja Satán le conviene que, 1) esas personas hagan creer a un sector de la población sus mentiras en cuanto a que han hablado con ángeles de Yahweh, y 2) ¡que otro sector de la población se resista a creer cuando estos encuentros realmente ocurran!
Amados, ¡a Ja Satán le encanta generar la duda, y sembrar la desconfianza e incredulidad, para que la Verdad de Yahweh no se sepa!
Amados, lo primero que hay que ver es que Yahweh no hace nada sin un propósito. ¿Por qué, entonces, le iría El a enviar un ángel Suyo, a una persona que ni siquiera cree en El ni en su Hijo..? Eso no tiene mucho sentido, ¿verdad?
Pero...tampoco hay que asumir que necesariamente Yahweh sea quien tenga que haber enviado a todo ser espiritual que se le aparezca a la gente, porque, ¿que tal si nó ha sido El quien lo ha mandado?
¿Que tal si el Padre Kodesh Yahweh no ha enviado a ese supuesto "ángel"? ¿Será esto posible?
Queridos míos, si no lo envió Yahweh, ¿quién mas lo pudo haber enviado...?
(No se desesperen, amigos y amigas, ya mismo vamos a ir a la Palabra Kodesh de Yahweh para dilucidar y desmenuzar todo esto, y encontrar la Verdad acerca de este tema tan profundo, que a la vez genera tanta curiosidad e interés. Pero tal vez haya algunos entre Ustedes que estén pensando acerca de los ángeles LO QUE NO ES, y si ese fuese su caso, quisiera que se pudieran dar cuenta.)
Fíjense en esto. Distintas personas han contado que se les han aparecido "ángeles" por la noche y se les han metido en la cama. ¿Se imaginan Ustedes? ¿Es que acaso los ángeles no tienen donde dormir, y tienen que acostarse en las camas de los humanos? Lo digo en serio, queridos amigos, ¡son cosas que uno se tiene que preguntar!
¿Son todos esos espíritus, necesariamente "ángeles"...? ¿...Y DE YAHWEH?
Habrá que ver...
No hace tanto tiempo una persona que se llama Ramón me contó que él vive en un cuarto que no tiene ventanas y que varias veces ha visto a un supuesto ángel atravesar una de las paredes que sólidas, entrar a su recámara como si viniera caminando, acostarse en su cama al lado suyo, quedarse ahí un rato "durmiendo," y luego irse por donde mismo vino. Calladito. Sin decir siquiera, "esta boca es mía."
Cuando Ramón me describió a ese supuesto ángel como una figura negra estilo silueta, y yo le comenté que eso se parecía mas a un demonio que a un ángel, no le gustó lo que le dije, ni ha vuelto a entrar a la página de la Kejilah. ¡Atrás, Ja Satán! ¡Pues mejor que se queden los dos por allá, lejos!
Ramón decía que él era cristiano y creía en Dios, que él era una persona espiritual, que venían calamidades al mundo como castigo, pero no leía la Biblia casi nunca. Y la primera vez que mencionó a "Jesucristo" fue inmediatamente despés de que yo le preguntara: "Oye Ramón, ¿y por qué tu nunca hablas de 'Jesucristo'?"
De modo que, ¿POR QUE habremos de creer que los "espíritus" como el que Ramón está viendo, son ángeles de Yahweh? (Espero que me estén siguiendo el hilo).
Hay gente infatuada con todo tipo de cosas. Pero eso no es todo, amigos y amigas. Ha habido casos de hombres y mujeres que afirman haber sido atacados sexualmente, ¡por seres espirituales!
Otra vez sucedió que una veterana actriz dramática cubana, llamada Ofelia D'Acosta, aseguró en la televisión que ella sostenía relaciones sexuales con un espíritu a cada rato, ¡como si ello fuera lo mas normal! (Ella ya murió hace varios años, pero supongo que todas esas declaraciones las habría puesto en internet antes de morir.) Amados, otra vez pregunto: ¿de seguro YAHWEH mandó a ese "ser espiritual" a donde esta mujer, a tener relaciones sexuales con ella...?
Por supuesto que no. Pero lo que casi nadie sabía es que Ofelia D'Acosta era una mujer "santera," ¡y practicante!
La mayoría de la gente que no sabe de estas cosas, tiende a pensar que todo lo extraño, milagroso o sobrenatural forzonsamente tiene que proceder del Padre Creador. No se detienen a pensar que "TAL VEZ NO."
Otros no dicen que hablan con ángeles, queridos amigos, sino que "van mas allá" en sus afirmaciones.
Fíjense, yo conocía un señor mesíanico como de 60 años, que de espiritual tenía lo que yo tengo de mécanico de automóviles (lamentablemente, nada), y que cada vez que se reunía en shabbat venía con el cuento de que YAHWEH---nadamás y nadamenos---le había hablado esa semana anterior....hasta que un día el pastor le dijo: "Mira, fulano, siéntate ya, y deja de estarte inventado cosas, porque conmoquiera aquí nadie te las cree." (Y era verdad, mis amigos, ¡nadie o casi nadie le creía eso a ese señor! Yo, en particular, no le creía ni "el padre nuestro" que recitase). Al oír tal reprensión, la cara se le puso como un tomate, y jamás volvió a decir "ni pío" de que habló con Yahweh.
Otra vez este servidor iba con otro hermano en la fé correcta, llamado Miguel Alvarez---a quien algunos de Ustedes ya conocen porque me es muy útil en el ministerio---manejando en automóvil de sur a norte desde Miami hasta Orlando. Si mal no recuerdo fue hace mas de diez años, era un domingo por la tardecita, y habíamos estado el fin de semana reunidos con otros hermanos.
Estábamos como a mitad de camino, en un tramo de la carretera que por kilómetros va en línea reacta, en el mismo medio de "la nada" (donde solo hay sembradíos de tomates y de lechugas a cada lado de la autopista), cuando a la orilla de la carretera vemos a un hombre de tez negra de pie, parecía de esos americanos del sur, con su auto color azul varado, y con el bonete del motor abierto. Obviamente, como si su coche se hubiera descompuesto.
Miguel iba conduciendo como a 90km (60 millas) por hora, dentro de lo legal, y le pasamos volando por el lado. Pero yo, que iba en la ventanilla, me di cuenta que el hombre me fijó la vista en mis ojos, aunque solo fuera por uno o dos segundos. Me dió lástima su situación. Pero seguimos en marcha como una flecha, sin siquiera hacer el intento de frenar.
Pasaron algunos segundos mas, y justo cuando yo iba a hablar, Miguel me dice exctamente lo mismo que yo le iba a decir: "¿Viste a ese señor negrito del carro azul pidiendo ayuda allá detrás? Pobrecito, quien sabe si lleva rato largo esperando ahí. Rafael, ¿tu crees que debemos ayudarlo?"
Amados, para mi eso fue confirmación instantánea. Enseguida yo le dije que sí, y añadí, "yo noté algo extraño, Miguel, nada malo por supuesto, pero me refiero a que tal vez estamos siendo probados por Yahweh. Mas nos vale virar y ayudarlo, y comoquiera no llevamos prisa alguna." Para sorpresa mía, Miguel me dijo que él pensaba lo mismo que yo, que sentía una noción extraña y una necesidad imperiosa de parar, y que por eso él quería regresar y ayudarlo.
En fin, en la autopista no se podía virar ni dar marcha atrás. Tuvimos que manejar varios kilómetros mas rumbo al norte, todo en línea recta, hasta donde por fin se pudo hacer un "viraje en U" en la carretera, para luego recorrer todos esos kilómetros en sentido contrario hacia atrás, viendo mas lechugas y lechugas a cada lado de la larga carretera intraestatal, para entonces verificar si el hombre del coche azul aún estaba allí---y estaba---y luego ir otro largo trecho hacia el sur hasta donde se pudiera hacer otro "viraje en U" para por fin retomar los carriles hacia el norte, y poder llegar hasta donde estaba él.
Todo nos demoró como 20 minutos. Pero milagrosamente allí estaba el hombre afro-americano y el coche todavía. Me extrañó mucho que mas nadie se hubiera detenido para ayudarlo, siendo que era de día, que en Florida la gente es muy servicial, y que en esos 20 minutos pasaron algunos carros por su lado. Ahora viene lo mas raro de todo, queridos míos. Lo primero es que su personalidad no pegaba nada con su apariencia física.
A simple vista, era un hombre negro, sin ningún atractivo, mas bien regordete y medio feo. Parecía un cargador de muelles ya retirado y sin mucha educación. Pero cuando el espíritu de Yahweh en uno, le discernía su espíritu, le revelaba a uno que éste era de carácter sabio, puro y sincero, y en su rostro y mirada se percibía una espiritualidad que los hombres normales no tienen. Digamos sin exagerar, una espiritualidad sobrenatural.
Cuando nos parqueamos, yo me bajé primero, lo saludé y le pregunté, "Señor, ¿no se ha parado NADIE a ayudarlo todavía?" Y el señor, con esa aura hermosa y descomunal en torno a sí que él tenía, nos miró y nos dijo en tono suave y pausado, "no, nadie; pero era a Ustedes dos a quienes yo estaba esperando. Yo sabía que iban a virar."
A mi esas cosas me paran los pelos que me quedan en la cabeza, queridos amigos y amigas, pero casi siempre las sé disimular, y Miguel también. Por eso me hice de oídos sordos a lo que acababa de oír, me abstuve de hacerle las mil preguntas que le hubiera querido hacer, y en vez lo esquivé y le dije: "Si, lo vimos aquí parado en el medio de la nada, bajo este sol, y supusimos que necesitaba ayuda. ¿Qué le sucede a su auto?"
El me respondió muy tranquilo y como con cierta resignación, o como si el asunto no fuera tan importante, "que no prende, sólo es eso." Entonces yo le dije, "¡Madre mía, pero vamos a ver que hacemos ahora, porque yo no sé "ni papa" de mecánica, yo espero que esto no sea algo complicado!"
Miguel le preguntó, "Oiga, ¿y por qué no le prende? ¿Hace algún ruido el motor? ¿Se le agotó la carga a la batería..?"
Pero el hombre dijo solamente, otra vez muy pausado, normal y sosegado, "no, por ahora es sólo que no le he puesto la llave. Pero se la voy a poner. Párense en frente y pónganse a mirar el motor. Me voy a sentar ahora y veamos que el auto prende." Entonces se sentó en el asiento, le dió vuelta con la llave a la ignición, y al primer intento, ¡prendió como si fuera un auto nuevo! Dijo sólo: "Ya está bien. Prendió. Me alegra que se hayan detenido, el Padre Creador los va a ayudar."
Por un segundo me vi tentado a buscar si por algún lado había cámaras ocultas, pensando que estábamos en una de esas bromas de la cámara cómica. Pero no, el señor era super-sincero, formal, sencillo, y serio. En otras palabras, en su carácter no se detectaba ni un ápice de cinismo, ni de broma, ni falsedad. Todo era rarísimo, pero en fin, ¡el auto prendió!
Eso mismo le dijimos, mientras él se bajaba del carro para cerrarle el bonete: "¡Uau, gracias al Creador! ¡Prendió! ¿Pero cómo prendió así nadamás? ¿Sin hacerle nada...?"
"Señor, explíquenos, ¿el auto no prendía antes? ¿Por qué no prendía, y ahora prendió tan fácil...como si se hubiera arreglado solo...?"
Pero él no respondía a nada de lo que le preguntábamos, sino que muy amable nos decía: "Ya se pueden ir, ya todo está bien, el Padre los va a ayudar, sigan en paz por su camino."
En realidad, yo no sabía si yo había escuchado lo que escuché de su boca, queridos míos, pero no hubo tiempo para mas nada. Solo yo le dije, "Señor, mejor váyase Usted alante de nosotros, por si el carro le vuelve a dar problemas, podernos parar a ayudarlo otra vez," pero él dijo que nó: "No, ya estamos bien, nada va a pasarme, ¡váyanse tranquilos!" Nos subimos a nuestro auto, y arrancamos bastante perplejos.
Tan pronto pudimos hablar sin ser oídos, Miguel y yo estallamos en gran curiosidad: "¿Ya oíste lo que dijo, Miguel? ¡Qué señor tan raro, Rafa! ¡Yo creo que era un ángel de Yahweh! ¡Yo también, Miguel! ¿No te parece que todo estaba como planificado? ¡El dijo: 'estaba esperando a Ustedes dos, yo sabía que iban a virar'! Miguel, ¡este es otro ángel, y ellos aparece y se desaparecen como por arte de magia, mira por el retrovisor a ver si aún está ahí! Rafa, sí, ¡todavía está donde mismo estaba! Ni siquiera ha movido el coche una pulgada. Miguel, pues no lo dejes de mirar. Rafael, pero no puedo conducir hacia adelante mirando todo el tiempo para atrás, ¡mira tú!"
Amigos, todo era muy raro, el señor no se iba. Yo volteé para atrás, y lo comprobé: "Miguel, que raro es todo esto. Vé un poco mas lento. El negrito no se ha movido ni un centímetro, ¿por qué no habrá querido arrancar todavía? ¿Qué estará esperando? ¿Será que no lo miremos? ¡Parece como si supiera que lo estamos mirando...y que no se quisiera ir por eso...yo la verdad todavía no entiendo, pero aquí hay algo rarísimo! Esto me luce mas raro cada segundo."
"Sí, Rafael, pero no lo mires así," dijo Miguel. "Vírate para enfrente y disimula un poco." Pues eso hice yo, pero le dije: "Pero tú no lo dejes de mirar por el retrovisor, okey?" Amados, les digo con toda sinceridad, que no había yo terminado de hablar, cuando Miguel exclamó asustado: "¡Se fue! ¡Ya no está! ¡Se desapareció como si se hubiera esfumado! ¡Rafael, el hombre y el coche DESAPARECIERON!"
Todo ocurrió en un segundo. Queridos míos, en el preciso instante en que yo dejé de mirar para atrás y que Miguel me "relevó" por el retrovisor, ¡el "negrito del coche" desapareció con todo y coche! Y para comprobarlo, yo miré para atrás tan rápido, que el cuello se me hubiera querido partir, queridos míos; pero mis ojos no querían dar crédito a lo que veían! O en este caso, "a lo que no veían"--- porque en todos los alrededores no había lugar posible donde ese coche se hubiera podido meter en tan pocos segundos. Amados, la carretera era línea recta, no había intersecciones, solo dos planicies a cada lado de la carretera, sembradas de lechugas y de tomates...¡y el extraño negrito y su auto no estaban por ninguna parte!
Todavía al día de hoy, ¡"lo creo y no lo creo"! Pero sí, por supuesto que lo creo, porque lo vimos con nuestros propios ojos . ¡Se trató de un ángel de Yahweh, queridos amigos y amigas! ¡Y nos echó una bendición!
Lo crean Ustedes o no lo crean, para Yahweh les es irrelevante, porque la realidad en la Torah es que El a veces nos pone a prueba usando a personas y situaciones especiales, y otras veces lo hace mandándonos a uno de sus ángeles fieles para bendecirnos y asegurarnos el camino...¡y cosas aún mayores que sólo El sabe!
En resumen, queridos míos: no crean a todo lo que oigan, ni a lo que "se les aparezca y desaparezca," pero TAMPOCO SEAN INCREDULOS, ¡porque Yahweh detesta la incredulidad!
Shalom y ubrajot,
Su siervo en Mashiaj,
Rafael
(PS. Lean la segunda parte de este mensaje, titulado "Acerca de los Angeles,"
donde mostramos algunos ejemplos de apariciones de ángeles en la Torah.)